Antiguamente las lámparas, tanto colgantes como de sobremesa, utilizaban un tipo de casquillo muy peculiar. Se trataba de unos cilindros de cartón que llevaban en su interior la rosca miñón o E14, y a la vez llevaban por encima una funda que simulaba una vela.

Este tipo de casquillos con funda, intentaban simular la luz de una vela. Incluso se les añadió posteriormente el efecto de gota de cera. No olvidemos que en los inicios de la iluminación, las lámparas no funcionaban con bombillas, sino que utilizaban velas de cera que iban consumiéndose y, por supuesto, goteando de la forma que todos ya conocemos.

Con la finalidad de que podamos restaurar esas antiguas lámparas o de que podamos fabricar unas nuevas de estilo retro, os ofrecemos nuestros casquillos con funda de vela, disponibles en diferentes formatos.

Las fundas de vela que proponemos, en su mayoría, incorporan en su interior un portalámparas de conexión automática. Este portalámparas es el que se debe instalar primero, para después colocar por deslizamiento la funda de efecto vela.

Así pues distinguiremos tres tipos de velas:

- Las de rosca E14 que incluyen el portalámparas en su interior y son lisas (disponibles en diferentes medidas)

- Las de rosca E14 que incluyen el portalámparas en su interior y en lugar de ser lisas, incluyen el efecto de gotas de cera (disponibles en varias medidas y varios colores)

- Las que se usarán para casquillos de rosca E27 (menos habituales). En este caso, se trata de fundas más gruesas que también incorporan el efecto gota de cera

Puedes ver todas las fundas con portalámparas en este enlace de nuestra tienda online, o ver el video demostrativo más abajo